A continuación transcribo un fragmento de una nota escrita por D. Efren Leonzo Dondé y publicado en 1923. La Fiesta de Chac-Mool en Izamal. Chac-Mool en Izamal 1877.
El arqueólogo D. Augusto Le-Plongeón, tras largas y prolijas labores, descubrió en las ruinas de Chichén Itzá, la estatua de Chac-Mool, a fines de 1876.
El gobernador del Estado que a la sazón era el Gral. D. Protasio Guerra, tuvo conocimiento oficial del hallazgo y dispuso que la estatua fuese conducida al Museo Yucateco.
Al efecto, nombró en comisión al Director de este establecimiento D. Juan Peón Contreras, para que procediese a recibir el tesoro arqueológico hallado en las citadas ruinas y traerlo a Mérida.
El Director del Museo Yucateco se situó a Izamal, con el objeto de que allí le fuese entregada las estatua.
En conocimiento el pueblo de Izamal del propósito del Sr. Peón Contreras, llenó de entusiasmo y amor a las glorias yucatecas. Decidieron hacer una sonada manifestación en el momento de ser recibida la estatua, procedente de Chichén Itzá.
¿Cuándo y en qué lugar fue la entrega?
Fue en la mañana del 26 de febrero de 1877, cuando llegó a Izamal la mencionada estatua. Inmediatamente se efectuó la fiesta.
La estatua se colocó frente a la subida del atrio parroquial, que mira hacia la plaza de la ciudad. En una tribuna colocada para tal efecto, diversos oradores tomaron la palabra en medio de la manifestación festiva.
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Don Pablo Bolio, un fervoroso amante de todas las buenas causas, se dirigió a la concurrencia en una expresiva y elocuente peroración. Recordó las generaciones creadoras, animadas por la libertad y el amor a las artes.
«Chac-Mool es uno de los recuerdos de esas generaciones, dijo, uno de los testigos innegables de que Yucatán, muchos siglos atrás, tuvo hombres ilustrados». Afirmó también D. Pablo, «que nuestro querido y bello suelo posee una rica historia incomparable». Dirigió un saludo al sabio anticuario Sr. Le-Plongeón y a su joven esposa.
También tomaron la palabra el Prof. D. Antonio Menéndez, el Sr. D. Alfredo Tamayo, con sendos discursos.
Igualmente, el inolvidable poeta itzalano, D. Felino Pacheco Pasos, al hacer uso de la palabra manifestó:
«La estatua (de Chac-Mool) gravitaba hace siglos bajo los cimientos de las ruinas de Chichén Itzá. Chac-Mool en Izamal 1877. Es prueba inequívoca de que los antiguos pobladores de la América estaban avanzados en civilización, cultura, ciencias y artes, como lo atestiguan también Uxmal, Hotzuc y otras ruinas, que son el más bello ornato del suelo yucateco y que nada tienen que envidiar a los regios alcázares de Menfis y Palmira«.
Continuará…