Ya había ocurrido el pasado eclipse anular del 14 de octubre de 2023, cuando revisé el Boletín Estadístico de 1897. Eclipse solar en Mérida 1897. Resulta que ahí se reportó un evento astronómico similar, pero hace más de 126 años en Mérida. Fue un eclipse de sol parcial.
Lo interesante es que ofrece muchos detalles precisos así como las variaciones en las temperaturas ambientales.
Describe la sensación que la gente de la época pudo percibir: el oscurecimiento parcial de la bóveda celeste, así como que se pudo observar el planeta Venus.
También menciona las técnicas que usaban para la observación del fenómeno, sin dañar la vista. A continuación le presento la transcripción de este interesante reporte.
EL RECIENTE ECLIPSE SOLAR 1897
Un eclipse solar ha sido siempre tenido, con razón, por un fenómeno extraordinario, por un verdadero acontecimiento celeste, porque rara vez llega a hacerse visible para determinado punto de la Tierra.
Así hemos juzgado conveniente ocuparnos, en este Boletín, del observado en Mérida el 29 de Julio último (1897), toda vez que en las atribuciones de la Estadística entra registrar, no sólo los fenómenos sociales, sino los meteorológicos y uranográficos (sic.) de sensación.
Los eclipses de Sol son, en verdad, para el conjunto del globo, más frecuentes todavía que los de Luna. Eclipse solar en Mérida 1897. Es sabido que en el período de 223 lunaciones, o sea de 18 años 11 días, llamado período cíclico de los eclipses, se verifican, por término medio, 70, de los cuales 29 son de Luna y 41 de Sol, de donde resulta que el número de éstos es al de aquellos como 3 a 2. Nunca pude haber en un año más de 7 eclipses ni menos de 2, y cuando sólo hay 2, ambos son solares: lo que patentiza la mayor facilidad con que éstos se producen. En cambio ¡con cuánta dificultad se dejan ver en una localidad dada!
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En ese período de 18 años se verifican siempre, próximamente, 28 eclipses de sol centrales, esto es, susceptibles de hacerse totales 6 anulares.
¿Cómo se genera un eclipse?
Llámase central el eclipse de Sol, cuando el eje del cono de sombra proyectado por la Luna, para producir el fenómeno, pasa exactamente por los centros del Sol, de la Luna y de la Tierra. En tal caso, si las distancias de la Luna y del Sol a la Tierra (distancia variable, como es sabido,) son tales que el diámetro o tamaño aparente de la Luna sea mayor que el del Sol, el eclipse resulta total, con duración.
Si los dos diámetros son iguales, el eclipse también será total, pero sin duración. Eclipse solar en Mérida 1897. Y en fin, si además de la condición puesta en primer lugar, el tamaño aparente de la Luna es menor que el del Sol, el eclipse resulta anular.
Tal fue el caso del eclipse reciente a que nos referimos, pues en el momento de verificarse el fenómeno, el diámetro aparente de la Luna alcanzaba sólo 30’42», 8, y el del Sol, 31’3o»,6. Diferencia a favor del Sol, 47″, 8.
El eclipse del 29 resultó, pues, anular para todos los puntos de la Tierra, situados en la línea en que pudo verse central. Dicha línea comenzó en el Océano Atlántico, hacia los 18° Longitud Este de Mérida y los 23° Latitud Sur.
Pasó casi tocando la costa oriental del Brasil, muy cerca del Cabo San Roque; siguió por la Isla de Guadalupe, en las Antillas. Por Puerto Rico, por la parte Norte de Cuba, y cortó la República Mexicana hacia los 23° Latitud Norte.
La línea paso a 2° al norte de Mérida
Vino terminando dicha línea en el Pacífico, hacia los 34° Long. Oeste de Mérida, y los 15° Lat. Norte. Pasó, pues, como 2° al Norte de esta ciudad.
Hízose visible dicho eclipse, como parcial, en la costa occidental del África, por Senegambia y las dos Guineas, donde el eclipse comenzó poco antes de la puesta del Sol. Como más o menos parcial hízose visible a uno y otro lado de la línea central antes descrita, en Sur América, excepto en la parte Sur de la Argentina, en Patagonia y en casi todo Chile.
Fue visible, así mismo, en toda la América Central, en todo México, en los Estados Unidos y en la parte Sur de la Nueva Bretaña. El eclipse comenzó á la salida del Sol, en el Océano Pacífico.
Eclipse parcial en Mérida
En Mérida, pues, fué sólo visible como parcial, pero ocultándose una porción muy considerable del disco solar. He aquí las condiciones precisas con que se verificó:
Tamaño del eclipse, o.9099, esto es, que desaparecieron los 0,91 del diámetro solar, equivalentes a 11 dígitos casi, si se considera dividido en 12 partes dicho diámetro.
Primer contacto: a las 7 hs. 11ms. y 33″24 segundos A.M., tiempo civil de Mérida. Fase máxima: a las 8 h. 33 m. 3.04 s. A.M. Ultimo contacto exterior o fin del eclipse: a las 10 h. 9 m. 19″56 s. A.M.
El diagrama que publicamos en otra plana de este BOLETÍN, representa geométricamente la porción eclipsada del disco solar, y el pequeño huso que permaneció iluminado durante la fase máxima.
En el mismo se verán señalados, con precisión matemática, los puntos del borde del Sol donde se verificaron el primer contacto y el último.
Variaciones en la temperatura
Las temperaturas observadas en diversos momentos de la mañana del 29, durante la producción del fenómeno, fueron las siguientes:
A las 7 hs. y 15 ms. A M. -25°, 7.
A las 8 hs. y 00 ms. A M. -27°, 0.
A las 8 hs. y 15 ms. A M. -27°, 3.
A las 8 hs. y 30 ms. A M. -26°, 7.
A las 8 hs. y 35 ms. A M. -26°, 7.
A las 8 hs. y 45 ms. A M. -26°, 8.
A las 9 hs. y 00 ms. A M. -26°, 9.
A las 9 hs. y 15 ms. A M. -27°, 1.
A las 9 hs. y 30 ms. A M. -26°, 7.
Como se ve, el termómetro descendió hasta 26° 8, temperatura relativamente baja, si se toman en cuenta los fuertes calores de la estación canicular:
El día siguiente, 3o de Julio, hallándose la atmósfera en las mismas condiciones generales, se observaron en la mañana estas temperaturas:
A las 8 hs. 15 ms.-28°,5.
A las 8 hs. 30 ms.-28°,8.
A las 8 hs. 58 ms.-29°,1.
A las 8 hs. 45 ms.-29°,3.
A las 9 hs. 00 ms.-29°,9. etc.
Comparando, pues, la temperatura 8 hs. 38 ms. del día 29 [durante la fase máxima del eclipse] con la de la misma hora del día 30, se comprueba desde luego un descenso de 2°.
La sensación que se vivió
Durante la fase más interesante del fenómeno, la luz del sol se debilitó notablemente hasta parecer la ciudad alumbrada por la Luna llena, escaseando la luz difusa en el interior de las habitaciones. Eclipse solar en Mérida 1897. Opacóse (sic.) de un modo considerable el azul del cielo, la naturaleza tornóse (sic.) melancólica y desfallecida, y pudo verse muy cerca del zenit la brillante Venus.
PROGRESO Yucatán INCREÍBLES imágenes antiguas
Recibida en un espejo la imagen del luminar eclipsado y reflejada sobre un muro o una pantalla cualquiera, se veía hermosa diadema de luz sobre la cual se destacaba, cual gigantesca bola de carbón, la Luna. Practicado en una tarjeta un pequeño orificio y exponiéndola al Sol, al atravesar cruzándose los rayos solares aquel agujero, dibujaban también sobre una superficie cualquiera, una imagen del disco del astro-rey, con la escotadura producida por la interposición de la Luna. El mismo fenómeno se observó recibiendo la imagen en una cámara oscura.
Reflejo de la sombra de los árboles
Como es sabido, el follaje de los árboles deja á menudo pasar algunos rayos del sol que pasan a alumbrar ciertas partes del suelo, en medio de la sombra del follaje. Pues bien, los intersticios de las hojas desempeñan el papel del agujerito de que antes hablábamos, resultando que las partes del suelo alumbradas son redondas u ovales. Durante el eclipse, la gran escotadura del disco del astro se reprodujo en dichos espacios claros en medio de la sombra, tomando la forma de elipses escotadas todas del mismo lado, y en la misma proporción.
Observóse (sic.) también otro fenómeno curioso explicable de un modo semejante al anterior. Las sombras de las personas, proyectadas desde una altura a una distancia considerable sobre el suelo, parecían todas recortadas y mostrando la misma escotadura del astro eclipsado.
Y en fin, no acabaríamos nunca de enumerar los raros fenómenos observados durante el eclipse a que nos referimos, ni tampoco lo permitirían las dimensiones de nuestro Boletín.
Hasta aquí la transcripción del documento. Eclipse solar en Mérida 1897. Se incluye el diagrama que acompaña esa publicación. Espero le haya resultado interesante, enterarse de cómo se vivió un evento similar al nuestro pero hace más de 126 años.
Mérida, Yucatán a 16 de octubre de 2023.
C.P. Humberto Sánchez Baquedano